Loading…

Limpiar Filtros

sábado 17
Sala 2
14:00 - 16:00
Congreso Didáctico
Congreso DIDÁCTICO Cartografías en la transmisión del psicoanálisis: Fronteras y Horizontes
Transmisión y Transformaciones. Escenarios inéditos en el campo psicoanalítico
Cordina:
Luz Marina Orejarena - SOCOLPSI (Colombia) (Colombia)

Participan:
María Cristina Fulco - APU (Uruguay) (Uruguay)

Miguel Calmón de Pin e Almeida - SBPRJ (Brasil) (Brasil)

Aline Wageck - SPPA (Brasil) (Brasil)

Cecilia Rodríguez - APG (México) (México)

17:00 - 19:00
Eje Culturalidades
El quehacer de los psicoanalistas en los momentos actuales. ¿Cómo pensar lo cultural, lo social y lo político?
Cordina:
Gleda Brand?o Araújo - SPMS (Brasil) (Brasil)

Relatan:
María Florencia Fernández - APA (Argentina) (Argentina)

Ana Lucia Dos Santos - SBPRP (Brasil) (Brasil)

Participan:
Javier García Castińeiras - APU (Uruguay) (Uruguay)

Ana Rozenfeld - APA (Argentina) (Argentina) [ver]
LA PANDEMIA DEL ODIO ANA ROZENFELD Como pensar hoy en este encuentro que nos convoca, el odio que se encarna en la subjetividad social o individual? Me refiero a ese afecto consciente, aliado de la pulsión destructiva que expresa la repulsa del Yo en su relación con el otro, un otro al que hay que eliminar , matar El odio destituye a la razón, carece de un fundamento lógico, expresa un relato pre-juicioso que condensa lo demencial con la ignorancia. El odio tiene perfiles sádicos crueles, es más aterrador y destructivo que el virus del Covid Pienso irónicamente si no se podrá descubrir también alguna vacuna contra el odio? El sujeto odiado es significado como una amenaza que afectaría la existencia de un sujeto o grupo humano El odio se constituye a través de un discurso ideológico transmitido a veces de una generación a otra. Suele ser una herramienta política implementada desde el poder para desviar la atención de la comunidad en momentos críticos El odio apela a la creencia del otro en la palabra del líder que lo promueve, aun cuando esa palabra manifieste un sentido absurdo, mas adelante lo ejemplifico. Una paciente militante del odio hacia el oficialismo, me decía que está muy preocupada por la pérdida de libertad, que el país está destruido, que los mapuches están ocupando en el sur tierras privadas Me pregunto cómo se ayuda a pensar en estas circunstancias en que el dialogo no es posible? Enfrentamos una dificultad donde el interrogante o el cuestionamiento es obturado Hace dos días en Wisconsin pudimos ver la violencia racial de la policía que asesino a un afroamericano por la espalda brutalmente Kyle Rittenhouse de 17 años con un arma en la mano mató a dos personas de color diciendo que defendía a la policía local, a los blancos y necesitaba proteger los comercios de los saqueos Si bien en varios estados de EEUU hubo movilizaciones de repudio a otros ciudadanos les pareció adecuada la feroz represión contra los afromericanos En estas circunstancias se desdibuja la dimensión humana, se torna banal el odio , la crueldad, la discriminación, la violencia, el asesinato La discriminación racial a lo largo de la historia ha sido un pretexto para la colonización Pienso que este tema donde se violan los Derechos humanos nos incumbe como psicoanalistas La aporofobia es el odio a los pobres. En Buenos Aires el año pasado dos jóvenes rociaron con kerosene y prendieron fuego a dos indigentes que vivian debajo de la autopista El 17 de agosto un grupo numeroso portando la bandera argentina se movilizó hacia el Obelisco, desmintiendo la pandemia muchos de ellos no usaban barbijo, atacaban verbalmente a través de sus pancartas al actual gobierno, a los judíos, a los homosexuales. Planteaban que no querían el comunismo, defendían el nuevo orden mundial, rechazaban las vacunas .Atacaron al periodismo que estaba trabajando. Muchos de los allí presentes no tenían claro el motivo por el cual se habían movilizado Algunos planteaban que la pandemia es un invento del gobierno, otros decían que rechazaban la la reforma a la constitución confundiendo la reforma judicial con la constitución En ese crisol de argumentos disparatados caracterizados por esa oposición absurda una cosa era clara ,la violencia del odio A todos estos sujetos no los satisfizo las medidas gubernamentales de ayuda Implementadas como préstamos a tasa cero, la tarjeta alimentaria a través de la cual los pobres podían acceder a la canasta de alimentos básicos, el subsidio de 10.000 $ otorgado por quinta vez a 9 millones de personas, el arreglo de la deuda con los grandes acreedores etc Como enfrentar esa frontera del odio delirante, ese déficit de la palabra sosteniendo argumentos absurdos No se trata de diversidad de opiniones o en todo caso debiéramos revisar su estatuto cuando el objetivo atenta contra los derechos humanos Muchos medios de difusión, voceros de grupos económicos poderosos incidieron en la convocatoria a la movilización de los llamados anticuarentena incidieron en la subjetividad social ,instilando el odio, rechazando el planteo ético del presidente que optó por salvar vidas en lugar de privilegiar lo económico Son modelos éticos diferentes los que sostiene Trump, Bolsonaro al que sostiene el presidente argentino Como se construye el objeto odiado? Erigiendo un chivoemisario responsable de los males que afectan a la comunidad. Acaso el germen de la xenofobia no es ese? Una magnífica película llamada Yo -Yo –Rabitt ilustra el adoctrinamiento que recibe un niño de 10 años que es adiestrado en la ideología nazi Tenía que realizar para ello varias pruebas, la primera era matar a un conejo, en pruebas sucesivas se le mostraban dibujos y relatos donde el judío es degradado a la categoría de humanoide repugnante en sus costumbres al que hay que había que eliminar Me generó estupor una noticia publicada por el diario Clarín ,donde Gustavo Iaies homologa el confinamiento de los jóvenes por la pandemia al confinamiento sufrido por Ana Frank en Holanda. Ignora este señor que Ana Frank se tuvo que esconder para preservar su vida de la persecución nazi que mataba a los judíos, mientras que el confinamiento planteado por el gobierno actual es para proteger la vida ,evitar la enfermedad, la muerte El odio subyace en estos comentarios periodísticos que se suman a intereses políticos El miedo es un virus que ataca la democracia La desigualdad social puede ser fuente de odio, motorizando rebeliones en búsqueda de igualdad de derechos El odio acompaña representaciones –fantasmas se inserta en las ideologías La ideología no es solo un sistema de creencias vinculado a las relaciones de producción. Es una construcción que sostiene principios de orden ético, moral, cultural, religioso Cuando el odio se instala en una ideología los Derechos Humanos. se ven vulnerados y el mundo puede tornarse inhóspito El presidente Trump expresa en su discurso que si no lo vuelven a elegir se viene el comunismo ,que el Covid fue generado por China. La ingenuidad de estos argumentos no sustentables se difunden mediáticamente y se apropian de la subjetividad de la gente ,de sus creencias. Tenemos otra frontera la del capitalismo neoliberal y las clases sociales. El neoliberalismo no solo busca la dominación económica sino también la colonización subjetiva que implica el evitar pensar, cuestionar los hechos, creer en las verdades impuestas por los grandes medios de difusión Los medios de difusión debieran estar al servicio de la educación de la salud y del pensamiento critico no al servicio discursivo tendenciosos de los grupos económicos poderosos Que podemos hacer nosotros los psicoanalistas ante la pandemia del odio, la muerte del pensamiento? Podremos instalar un nuevo saber o que hacer ante el odio? La ética del psicoanálisis no se circunscribe al desciframiento del inconsciente es una ética de los D.H que implica poder pensar y debatir el odio como una enfermedad de la cultura Los psicoanalistas somos participes responsables de lo que sucede en nuestra contemporaneidad ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- A pandemia do ódio Ana Rozenfeld Como pensar hoje neste encontro que nos convoca o ódio que se encarna na subjetividade social ou individual? Refiro-me a esse afeto consciente, associado à pulsão destrutiva que expressa a repulsa do Eu na sua relação com o outrem, um outrem a quem se tem que eliminar, matar. O ódio destitui a razão, não tem um fundamento lógico, expressa um relato preconceituoso que sintetiza o demencial com a ignorância. O ódio tem aspectos sádicos, cruéis, é mais aterrador e destrutivo do que o vírus do Covid. Eu penso com ironia se não se poderá descobrir também alguma vacina contra o ódio? O sujeito odiado é significado como uma ameaça que afetaria a existência de um sujeito ou grupo humano. O ódio se constitui através de um discurso ideológico transmitido frequentemente de uma geração à outra. Costuma ser uma ferramenta política implementada desde o poder para desviar a atenção de uma comunidade em momentos críticos. O ódio apela à crença do outro na palavra do líder que o promove, mesmo quando essa palavra manifeste um sentido absurdo; que exemplificarei mais adiante. Uma paciente, militante do ódio ao oficialismo, me dizia que estava muito preocupada pela perda da liberdade, que o país está destruído, que no sul os mapuche estão ocupando terras privadas. Pergunto-me, como se ajuda a pensar nessas circunstâncias em que o diálogo não é possível? Enfrentamos uma dificuldade onde a interrogação ou o questionamento está obstruído. Recentemente vimos em Wisconsin a violência racial da polícia que assassinou um afro-americano pelas costas de um modo brutal. Kyle Rittenhouse de dezessete anos com um arma na mão matou duas pessoas de cor dizendo que defendia a polícia local, aos brancos e precisava proteger os comércios dos saqueios. Mesmo que em vários estados dos EUA houve demonstrações de repúdio, outros cidadãos acharam adequada a feroz repressão contra os afro-americanos. Nessas circunstâncias se dilui a dimensão humana, torna banal o ódio, a crueldade, a discriminação, a violência, o assassinato. A discriminação racial ao longo da história tem sido um pretexto para a colonização. Acredito que esse tema onde os direitos humanos são violados é uma incumbência para nós como psicanalistas. A aporofobia é o ódio aos pobres. Em Buenos Aires no ano passado dois rapazes despejaram querosene e colocaram fogo em dois indigentes que moravam embaixo de uma rodovia. E no dia 17 de agosto um grupo numeroso de pessoas que carregavam a bandeira argentina se mobilizou indo até o Obelisco, desmentindo a pandemia. Muitos deles não usavam máscara, atacavam com seus cartazes ao governo federal, aos judeus, aos homossexuais. Diziam que não queriam o comunismo, defendiam a nova ordem mundial, rejeitavam as vacinas. Atacaram os jornalistas que estavam trabalhando. Muitos nem sabiam o motivo pelo qual tinham se mobilizado; alguns deles afirmavam que a pandemia era uma invenção do governo, outros diziam que rejeitavam a reforma da Constituição, confundindo-a com a do poder judiciário. Nessa mistura de argumentações sem sentido, uma coisa era evidente nesta oposição absurda, a violência do ódio. Todos esses sujeitos não ficaram satisfeitos com as medidas governamentais para ajudar a população: empréstimos sem juros, cartão alimentação para os pobres obterem a cesta básica, o subsidio de $10 000 (pesos argentinos), outorgado pela quinta vez a nove milhões de pessoas, a culminação exitosa da renegociação da dívida externa, etc. Como é possível enfrentar essa fronteira de ódio delirante, esse déficit da palavra sustentando argumentações absurdas? Não se trata de diversidade de opiniões ou, em todo caso, deveríamos rever seu estatuto quando o seu objetivo atenta contra os direitos humanos. Muitos meios de difusão, porta-vozes de grupos econômicos poderosos influenciaram na convocatória à mobilização dos chamados “antiquarentena”, incidiram na subjetividade social insuflando ódio, rejeitando a proposta ética do presidente argentino, que optou por salvar vidas em vez de privilegiar a economia. Uma opção totalmente diferente às de Trump e Bolsonaro. Como é que se constrói o objeto odiado? Procurando um bode expiatório dos males que afetam à comunidade. Mas, não é essa a semente da xenofobia? Tem um excelente filme chamado Jojo Rabbit que mostra o doutrinamento que sofre um rapaz de dez anos com a ideologia nazista. Ele tinha que fazer diversas provas e a primeira era matar um coelho. Nas sucessivas provas lhe mostravam desenhos e relatos nos quais o judeu é degradado à categoria de sub-humano, de costumes repugnantes, que devia ser eliminado. Assombrou-me uma notícia do jornal Clarín assinada por Gustavo Iaies que compara o confinamento dos jovens na pandemia com o de Ana Frank na Holanda. O jornalista ignora que Ana Frank teve que se esconder para preservar sua vida da perseguição nazista, que matava judeus enquanto o confinamento decretado pelo governo argentino é para proteger a vida, evitar a doença, a morte. O ódio é subjacente nesses comentários de jornalistas que apoiam interesses políticos. O medo é um vírus que ataca à democracia. A desigualdade social pode originar ódio, provocando rebeliões na busca de igualdade de direitos. O ódio acompanha representações - fantasmas. Insere-se nas ideologias. A ideologia não é somente um sistema de crenças vinculado às relações de produção. É uma construção que sustenta princípios de ordem ética, moral, cultural, religiosa. Quando o ódio se instala numa ideologia os Direitos Humanos são vulnerados e o mundo pode se tornar inóspito. O presidente Trump expressa em seu discurso que se ele não for reeleito virá o comunismo, e que o Covid foi gerado pela China. A ingenuidade desses argumentos insustentáveis propagados pela mídia se apropria da subjetividade das pessoas, de suas crenças. Nós temos outra fronteira: a do capitalismo neoliberal e as classes sociais. O neoliberalismo não só procura a dominação, mas também a colonização subjetiva que implica evitar pensar, questionar os fatos, e acreditar nas verdades impostas pelos grandes meios de difusão. Esses que deveriam estar a serviço da educação, da saúde e do pensamento crítico, e não ao serviço do discurso tendencioso dos grupos de poder. Que podemos fazer nós, psicanalistas perante a pandemia do ódio, da morte do pensamento? Poderemos produzir um saber novo? Ou, então, o que fazer diante do ódio? A ética da psicanálise não é circunscrita a decifrar o inconsciente. É uma ética dos Direitos Humanos que inclui poder pensar e debater o ódio como uma doença da cultura. Os psicanalistas somos participantes responsáveis do que acontece na nossa contemporaneidade. Traducción: María Elena Machado. Traductora pública nacional idioma inglés. Auxiliar bilingüe en idioma portugués con orientación en cultura

Miguel Calmón de Pin e Almeida - SBPRJ (Brasil) (Brasil)

Griselda Sanchez - APG (México) (México)